Capítulo160
Después de unos minutos.
Alejandro llegó directamente a las afueras de la mansión de Clara.
Bajo la ventana del coche y miró las cálidas luces. Pensar que en este momento Rodrigo estaría
dentro con Irene lo hizo sentirse sofocado.
El ceño fruncido de Alejandro, la palma de su mano sudorosa sostenía el teléfono móvil.
En la pantalla, Irene llevaba un sensual camisón de tirantes, su figura elegante y seductora se
insinuaba.
Antes, ella solo solía usar vestidos holgados de algodón blanco, parecía una mujer embarazada que
no mostraba su figura en absoluto.
Después del divorcio, se liberó completamente, convirtiéndose en una seductora hada que seducía
y encantaba a los hombres.
El pecho sólido de Alejandro subía y bajaba, miraba la foto con los ojos entornados, se aflojó la
corbata meticulosamente atada.
Mientras tanto…
Rodrigo miraba a Clara comer fideos, estaba tan sorprendido.
Creció como un niño rico y mimado, su madre lo trató como a un tesoro. A los quince años bebió su
primer sorbo de Coca–Cola, a los dieciocho años probó su primer trozo de pollo frito.
¿Fideos instantáneos? ¿Cómo podía alguien como el Señorito Rodríguez comer esa comida basura?
-¿No vas a comer? Si se enfría, no sabrá bien.
-Estoy, estoy demasiado feliz, simplemente no sé cómo empezar…-Rodrigo tomó los palillos y
sonrió torpemente.
-No es para tanto, solo es un plato de fideos. Si te gusta, tengo más, llévatela cuando te vayas.
-No, no, no hace falta–mordiéndose el diente, Rodrigo estaba dispuesto a soportar un poco de
sufrimiento para reconquistar a esta dura mujer.
Así que se puso los fideos en la boca. Pero al morderlos, el chile le quemó la garganta y su lengua
Miro furioso a Aaron quten tenia una expresion inocente y purs, pero la sonrisa traviesa en is comisura de sus labica delataba aus malas intencioneE
Ast que no puedes comer picante? Debertas habermelo dicho antes,Te quero bastante eh?
Clara le dro una taza de agua a fodnige y el tumbre son en ese momento
-Hay mucho bullicio esta noche, voy a ver quien es
Aaron fai a abrit la puerta
En el momento en que el apuesto rostro de Alejandro apareció en la pantalla, Aaron unrad um apretón en el corazón y dio un paso atrás
-Estoy buscando a bene
-Aaron usen es?
En ese momenta Clara y Rodrigo, que estaba rojo por el picante, salseron,
Al ver al hombre en la pantalla, ambos se quedaron atomitos
-¿Cómo lo sabe? ¿Fuiste tu quien se lo dijab–Clara reacciono rapidamente, a mirada penesance
se clavo en el rostro de Rodrigo 8
-tre. No tuve opción, Alejandro me amenaza
Rodrigo tema lagrames en los ojos, se sostenia el pecho y todavia estaba sin alienta, Él daju čl
dijo que si no le decia donde vivas, el romperta nuestra amistad También dijo
Tambien dijo que?-Clare francs el seño
~Tembién dijo que si no se lo decia, el se negaria a limar el divorcio contigo. Si usizdes dos no
firmen el divorcio, Diego y yo no podremos estar contige
Alejandro, eres un sinverguenza!
Clara estates furiose, sus ojos se volvieron rojos. Hizo puños con las manos y sin deon una palang,
66to hacia haión y lo puse detras de ella Luega en tono fro, dijo. Quien le dio pertuso para
aparerer en inl puerta? Vete de inmediato o llamare a seguridad
free, sal y habla comigo dijo Alejandro con la frente fruncida mastrande pietta
sy torio
+15 BONOS
Clara se rio friamente–¿Quién eres tú para decirme que salga y hable contigo?
Rodrigo, sal y habla conmigo–Alejandro dirigió directamente su voz a Rodrigo, con los ojos
enrojecidos
No lo haré–Rodrigo sabia muy bien el carácter de su amigo y se sentía un poco asustado.
Rodrigo!
-Rodrigo es mi invitado, vino desde lejos a traerme un regalo, y si acepto su regalo, no hay razón
para echarlo como un invitado no deseado.
Clara habló con un tono frio: -Señor Hernández, no eres bienvenido aquí, por favor, vete.
Alejandro miró con intensidad, justo cuando iba a hablar, Clara cerró el intercomunicador
directamente.